Si su pareja se queja de sus ronquidos, se siente fatigado o a menudo despierta con sequedad de boca o dolor de garganta, es posible que padezca apnea del sueño. Según la Clínica Mayo, la apnea del sueño es un trastorno del sueño potencialmente peligroso que produce que deje de respirar y vuelva a hacerlo muchas veces. Este tipo de enfermedad puede provocar hipertensión y aumentar las posibilidades de sufrir problemas al corazón. Solo su médico puede diagnosticarle apnea del sueño, pero un sencillo cuestionario de Salve su sueño de Philips puede ayudarlo a determinar sus posibilidades de padecer esta enfermedad y otros factores de riesgo posibles, como el peso o la edad, para que pueda discutirlo con su médico. Si su puntuación del cuestionario indica que tiene posibilidades de padecer apnea del sueño, que ronca o experimenta fatiga, que a menudo sufre de sequedad de boca en las mañanas o dolores de garganta, programe una consulta con su médico. Es posible que deba someterse a un estudio del sueño para recibir un diagnóstico de apnea del sueño y determinar la gravedad. Si le diagnostican apnea del sueño, su médico podría recetarle una máquina de presión positiva continua en vías respiratorias (CPAP), que, según la Clínica Mayo, es la forma más popular y confiable de tratar la apnea del sueño. Una máquina de CPAP incluye uno de los diferentes tipos de máscaras para evitar la apnea y los ronquidos mediante el despeje de las vías respiratorias durante el sueño. Sin embargo, la Clínica Mayo indica que los pacientes también pueden adoptar algunas técnicas de autocuidado para tratar la apnea del sueño, especialmente en casos más leves. Es por esto que no debe sorprenderse si su médico le recomienda adoptar uno o más de los métodos que se presentan a continuación en su estilo de vida mientras le realizan pruebas para diagnosticarlo o después del diagnóstico de apnea del sueño: Bajar de peso: en el caso de los pacientes con sobrepeso u obesidad, bajar al menos un poco de peso puede ayudar a aliviar la constricción de las vías respiratorias. Evitar el alcohol, los tranquilizantes y las pastillas para dormir: el alcohol y algunos medicamentos pueden empeorar la apnea obstructiva del sueño y la somnolencia. Dormir recostado de lado o sobre el abdomen: dormir recostado sobre la espalda puede provocar que su lengua y velo del paladar se apoyen en la parte posterior de su garganta y bloqueen las vías respiratorias. Para evitar dormir recostado sobre su espalda, cosa una pelota de tenis en la parte posterior de la parte de arriba de su pijama. Mantener las fosas nasales despejadas mientras duerme: si sufre una congestión, consulte a su médico sobre aerosoles nasales con solución salina, descongestionantes u otros medicamentos para ayudar a mantener sus fosas nasales despejadas.